Todos, en mayor o menor medida, tenemos un poco de “repelús” a la ITV. Con una serie de artículos intentaremos arrojar un poco de luz sobre algunos temas que atañen al funcionamiento de ITV y en las que el usuario se pueda ver reflejado. Como punto de partida, y para que conste, el cometido de la ITV es aplicar tanto el Manual de Inspección para ITV como el Manual de Reformas, redactados en el Ministerio de Industria.
En el caso de la comunidad de Madrid, desde hace algunos años, el sector está liberalizado. Esto quiere decir que cualquier persona o empresa que cumpla los requisitos para montar una ITV puede hacerlo, y poner el precio que quiera (inferior al recomendado). Aparte de todo esto, la filosofía de la ITV debe ser la de ayudar. Ayudar a la identificación de los fallos existentes en el vehículo (los tipificados en el Manual de Inspección) e informar al usuario de los mismos, para que comprenda su importancia y pueda buscar una solución.
Para comenzar con esta serie vamos a hablar de homologaciones, pero para poder entender lo que viene a continuación es necesario explicar un concepto que muy poca gente conoce, el de contraseña de homologación del vehículo.
La contraseña de homologación indica el nombre de un documento llamado Ficha Reducida mediante el cual una marca homologa un vehículo en concreto. Esta contraseña puede tener muchas formas dependiendo del tipo de vehículo. La forma más común de todas bien podría ser: e1*2001/116*0501*01, donde 2001/116 hace referencia a la Directiva 2001/116/CE, aunque hay muchas directivas que van actualizándose con el tiempo. En esa Ficha Reducida del vehículo se pueden consultar todas sus características (neumáticos, referencia escapes, medidas, masas autorizadas, etc.) dependiendo del tipo, variante y versión del mismo. Es decir, así salió el vehículo de fábrica.
Pasando a la homologación en ITV es común que, a la hora de comprar un coche, nos ofrezcan en concesionario una serie de accesorios que lo hacen más atractivo. Para entender un poco de qué estamos hablando, estos son dos ejemplos:
Dacia Duster
Dacia no se caracteriza por tener unos coches muy equipados, sin embargo, tienen muchas opciones en accesorios, como pueden ser una defensa cromada o unas estriberas. No negaremos que, un vehículo de ese tipo gana mucho con unos accesorios bien elegidos.
Opel Corsa
La gama media tiene disponibles accesorios, como los añadidos de paragolpes, taloneras y alerón que hacen que estéticamente tengamos un coche más deportivo, pero con un motor más asequible en el día a día.
Estos dos vehículos no salen así de sus respectivas fábricas, por lo que todo lo que se le monte en concesionario es necesario homologarlo. Por otro lado, hay coches que salen con los accesorios de fábrica. La pregunta entonces es: ¿Cómo puedo saber si mi coche tiene todo homologado? La respuesta es: Mirando la ficha técnica.
Si viene de origen con los accesorios, es la fábrica la que, al hacer la ficha técnica, incluye estos accesorios.
Por supuesto las versiones deportivas de algunos turismos, como por ejemplo (Renault RS, Ford RS y ST, Opel OPC, Subaru STI, etc.) salen de fábrica en unas condiciones diferentes a las versiones más normales (diferentes paragolpes, alerones, etc.) aunque éstos también tienen un catálogo con otros accesorios diferentes, como alerones y kits de carrocería que habría que homologar.
Si no viene de origen, es el concesionario, o el usuario final, quien debe acudir a la ITV a homologarlo
Los pasos para la homologación de accesorios originales son sencillos.
- Pedir Informe de Conformidad a la marca del vehículo. Viene firmado digitalmente por el responsable de homologaciones de la marca y en él aparece el código de reforma que aplica y los campos de la ficha técnica que deben variar (anchura total, altura total, etc.). Todos o casi todos los accesorios originales están dentro de la homologación de tipo del vehículo y por tanto no será necesaria la realización de Proyecto Técnico*.
- Certificado de Taller que avale el montaje de los accesorios. Tiene que ser el documento original, con firma del responsable del taller y sello. Aunque seamos nosotros mismos, si tenemos los conocimientos y los medios adecuados, quienes hayamos montado los accesorios, es un taller con número de Registro Industrial (autorización de la Dirección General de Industria para ejercer la actividad) y número de Registro Especial (cada reforma necesitará una especialidad como Mecánica, Chapa y Pintura, Electricidad, etc.) quien debe emitir el Certificado. Las piezas deben ir acompañadas de un croquis de montaje donde vienen identificadas las partes de que constan y cómo van montadas, para que se pueda comprobar en ITV.
- Acudir a la ITV con el vehículo, la ficha técnica, el permiso de circulación, el Informe de Conformidad y el Certificado de Taller. Para la legalización de reformas en ITV tiene que acudir el titular del vehículo o bien una persona autorizada por él.
- En ITV se le anotarán los accesorios en la ficha técnica.
Extra: A partir de que los accesorios han sido homologados, el vehículo tiene que presentarse en ITV para las inspecciones periódicas tal y como aparece en su ficha técnica, es decir, con los accesorios que han sido legalizados.
Si llegado el caso queremos volver a dejar el coche como estaba, necesitaremos acudir también a la ITV. Esta vez será necesario solamente un Certificado de Taller que avale el desmontaje de los elementos en cuestión.
Espero que este artículo sirva de ayuda para aquellos que han adquirido un coche con accesorios en los últimos meses y que van a tener que pasar la primera ITV a su vehículo, para que no se encuentren con una sorpresa en forma de “Desfavorable” en su ficha.
(*) Proyecto Técnico: Documento para la homologación de ciertas Reformas de Importancia, como por ejemplo la instalación de accesorios fuera de la homologación de tipo del vehículo, separadores/espaciadores, muelles deportivos, etc.