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Todo lo que hacemos mal en las rotondas o glorietas

 José Antonio Aranda García  20 noviembre, 2016
¡PROBABLEMENTE NO LO SABES!

Las rotondas son un gran invento, claro que sí, y es que no solo agilizan el tráfico, sino que además, los accidentes que se producen en ellas son -en general-, menos graves que los que ocurren en las intersecciones reguladas por semáforos, o mediante stop o ceda el paso. Pero la verdad es que no sabemos conducir por ellas

Algunos podrían alegar la excusa de haberse sacado el carnet antes de que se inventaran, y reconozco que que se hace muy poco en los medios de comunicación más populares para formar y concienciar a los conductores, pero lo cierto es que no tenemos excusa, porque la seguridad debería de importarnos a todos, y además la ignorancia no exime del cumplimiento de las normativas y leyes.

La idea básica de las rotondas es aumentar la fluidez minimizando las retenciones. Para conseguirlo, lo ideal sería que la mayoría de vehículos pudiera incorporarse a ella sin apenas detenerse, reduciendo la velocidad, y haciendo un simple “ceda el paso”, o en su defecto, deteniéndose el mínimo tiempo posible.

Rotondas glorietas

Así es fácil llegar a la conclusión de que para que las rotondas funcionen bien -y de forma segura-, es vital que los vehículos que ya circulan por la rotonda lo hagan de forma correcta ya que ello facilita el acceso del resto del tráfico a la rotonda, y por supuesto, a una velocidad razonablemente lenta, y usando los intermitentes… y aquí es donde fallamos de forma estrepitosa.

¿Qué dice la Dirección General de Tráfico?

En la web oficial de la DGT puede descargarse el gráfico que ilustra este artículo, en el que se indican los comportamientos correctos e incorrectos más habituales. Verás que la rotonda del gráfico tiene tres carriles, pero a efectos prácticos, los dos carriles interiores (B y C) tienen una consideración parecida. Para este artículo, he modificado el gráfico de la DGT creando nuevos gráficos más simples, que me permitirán explicar con más detalle un tema tan importante.

Rotondas - Chicane

El error más típico: La chicane

En la mayoría de ocasiones -y por motivos lógicos-, cruzamos las rotondas con la intención de seguir recto, y como siempre andamos con prisas, nuestro subconsciente sugiere trazarlas como si se tratara de una chicane -para perder el menos tiempo posible-, y si en el carril derecho hay tráfico, y hacer cola es de tontos, pues entramos por el carril izquierdo… ¡mal, muy mal!

La trayectoria del coche D -naranja- es totalmente incorrecta, -y también las posibles variaciones en color amarillo-, y es que si antes de llegar a la rotonda, pretendemos seguir recto -es decir, saliendo por la segunda salida de la rotonda-, la única trayectoria correcta es la del coche A -azul-, que consiste en entrar por el carril derecho, recorrer la rotonda por el carril exterior, y salir también por el carril derecho.

¿Porque son incorrectas las trayectorias naranja y amarillas? Pues muy sencillo: trazando las rotondas de esta forma, reducimos muy poco la velocidad y además, utilizamos todos los carriles, dificultando la incorporación del resto del tráfico a la rotonda y convirtiendo la en una especie de cruce con cedas el paso, en el que la preferencia la tendría el más osado y agresivo.

Rotondas - Trayectorias correctas

Trayectorias correctas

En la imagen vemos como los coches A -azul-, que salen por la primera o segunda salida, entran a la rotonda por su carril derecho, trazan la rotonda por el carril exterior y salen por el carril derecho, y por supuesto, usando el intermitente para indicar que salen de la rotonda.

El coche B -verde-, entra a la rotonda por el carril izquierdo, trazando la rotonda por el carril interior, pero -muy importante-, cambia al carril exterior antes de tomar la salida, de forma que cuando sale de la rotonda, lo hace desde el carril exterior.

Rotondas - Trayectorias incorrectas

Trayectorias incorrectas

Las trayectorias de los coches C -rojo- son incorrectas, pues el coche sale de la rotonda desde los carriles interiores -siempre hay que salir desde el carril exterior-. Por lo que respecta al coche E -fucsia-, también sale de la rotonda desde un carril interior, lo cual no es correcto.

¿Y en caso de accidente?

  • Si un coche que circula por un carril interior C -rojo- intercepta la trayectoria de otro que circula por un carril exterior B -verde, o A -azul- y se produce un accidente, la culpa siempre será del coche rojo.

¿Y que debe de hacer el coche rojo si quiere salir de la rotonda, y hay coches a su derecha? Muy fácil: darle otra vuelta a la rotonda.

  • Si en el momento de salir, el coche D -naranja- y el B -verde- colisionan, el culpable será el coche D, ya que está realizando una maniobra incorrecta al salir de la rotonda desde un carril interior.

Resumiendo:

  • Si vamos a tomar la primera salida, o pretendemos cruzar la rotonda tomando la segunda salida, siempre entraremos a la rotonda por el carril derecho, y circularemos por la rotonda por su carril exterior.
  • Solo entraremos a una rotonda por el carril izquierdo si pretendemos girar a la izquierda, es decir, si vamos a tomar la tercera o cuarta salida de la rotonda.
  • Solo utilizaremos los carriles interiores de la rotonda si vamos a tomar la tercera o cuarta salida.
  • Usaremos siempre el intermitente para indicar que salimos de la rotonda.
  • Si pretendemos cambiar a un carril exterior, y este estuviera ocupado, respetaremos la preferencia del otro vehículo, y si fuera necesario, daremos otra vuelta a la rotonda hasta que podamos cambiar al carril exterior.
  • En el momento de girar a nuestra derecha para salir de la rotonda, tomaremos el carril derecho si estuviera libre.
  • No es norma, pero sí es de sentido común el circular por las rotondas a una velocidad relativamente reducida, de forma que facilitemos la incorporación a la rotonda de otros conductores.
  • De acuerdo, en nuestro país hay muchísimas rotondas mal diseñadas, o tan pequeñas, que resulta casi imposible cumplir la normativa -en algunas, incluso se nos obliga a entras en ellas por el carril izquierdo si queremos seguir rectos- pero ten en cuenta que en caso de accidente, no te valdrá la excusa de que “es que esta rotonda es muy estrecha”.

Bien, soy consciente de que este artículo no va a llegar a todo el mundo, pero espero haber aportado mi granito de arena en este campo, y si te ha parecido interesante o que puede servir de ayuda, te agradecería muchísimo que aportaras tu granito de arena reenviándolo a tus amigos.

Sibre el autor:  José Antonio Aranda
«Pistonudo desde mi más tierna infancia y proyectista de profesión. Todavía me entretengo soñando en ser diseñador mientras hago bocetos. Evidentemente, me gusta el diseño y las cosas bellas y/o bien diseñadas, los roadsters, la fotografía, y cómo no, conducir mi MX-5 y viajar en él.»

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